jueves, 24 de octubre de 2024
Si quieres
miércoles, 16 de octubre de 2024
Y así me desespero
Y así me desespero,
esperando las estrellas
que ya nunca me visitan,
ni en las noches que se rinden,
ni en los amaneceres fríos.
Entre el brillo de la oscuridad
solo sombras que se alargan,
que buscan los infiernos
donde el alma se desangra.
Solo el alma descarriada
me devuelve la mirada,
que pérdida y despistada,
busca el reflejo herrante
del destello que la llama.
Pero el cielo sigue mudo
y las estrellas ausentes.
Solo el eco de un suspiro...
en la noche que enloquece.
martes, 15 de octubre de 2024
Versos dormidos
martes, 8 de octubre de 2024
Soy eco y susurro
sábado, 21 de septiembre de 2024
Esa visión tardia
miércoles, 18 de septiembre de 2024
Y aunque el mundo
martes, 17 de septiembre de 2024
No busco borrar
lunes, 16 de septiembre de 2024
Veinte años bajo el cielo
Veinte años bajo el cielo, cruzando tierras sin fin,
crucé mares y océanos, pero nunca volví a mí.
Lastré una mochila de sueños, de historias que no conté,
y ahora que piso mi tierra, no sé quién fui, ni seré.
Las calles que eran mis versos hoy parecen extranjeras,
los rostros que amé de niño son sombras de otras vidas.
El tiempo tatuó en mi piel, la retina de lo que vi,
y al volver a mi casa, ya no sé dónde nací.
Exploré verdades en cada rincón,
prisionero de la razón,
y ahora que el viaje acaba, ya no encuentro el mismo sol.
He sido mil caras distintas, mil vidas que no entendí,
y aunque el camino me trajo de vuelta, no sé qué hago aquí.
El eco de olvidadas risas resuena en la soledad,
me pierdo en recuerdos que duelen, en todo lo que dejé de amar.
Soy un extraño en mi historia, un viajero sin fin,
y aunque he llegado a mi casa, aún no sé si es mi fin.
¿Dónde quedó aquel niño que soñaba con volar?
Hoy encuentro mi mundo, pero no sé qué buscar.
veinte años lejos de todo, y al regresar al hogar,
descubro que aún mi viaje, no ha hecho más que comenzar.