Aguamarina

Mujer de la mirada aguamarina

amaneces como la esperanza de la ilusión certera

recordándome que el amor viene vestido de verde,

imaginando que la pasión desbocada de tu pecho

aguarda sin censura, los placeres de la piel desnuda.

Jardines donde las inmortales amapolas de verdes versos

encienden las poesías infinitas con el correr de las estaciones,

susurrando al eco sordo, que a mi alma le gustan tu sonrisa.

Uniendo amor, piel, pasión y vida,

suspiro por ese corazón sincero, por hacerlo uno y desvestirlo junto al mío.

Forjo en la vereda de tus sueños los poemas más bellos

lanzando besos al viento donde los versos robados encuentran su dueño.

Ojos de mirar puro, de noches perfectas, de caricias lentas,

remansos de paz y abrazos eternos. Donde amores libres y palabras bellas

empañan los cielos con el sentir acompasado de esas pupilas serenas,

sosegadas, de tan ruidosa risa que rasgan cortinas viejas.

Mirando las estrellas trasnochadas, paro el minutero y revivo

almidonando los pliegues del tiempo que paso perdido en tus brazos,

resucitando los momentos para bordarlos y hacerlos eternos,

tarareando las canciones roncas que se pierden en tu horizonte,

imaginado que bogan en el viento buscando tu figura, y queriendo,

naufragar en la aguamarina de tus ojos

encendiendo el ardor de este corazón que se entretiene,

zurciendo amores para vestirlos de verde.

Texto y foto: @poemasencerrados

Intagram:@poemasencerrados